01 agosto 2007

Half baked




Hay días extraños y noches bizarras. A veces le cae al cantón un wey pariente lejano y le doy quebrada un día o dos. Se le va la hebra, un poco tocado el wey. Esa noche, estaba yo rendido por el ensayo, ensayamos como 4 horas porque se aproxima una tocada, y el chiste es q me pide q ponga una peli, y pongo Half baked. Cagadísima, es una película muy chistosa de unos mariguanos de hueso colorado y que tienen aventuras mariguanas y así. Para entrar en ambiente, prendo la pipa de yerbita vaciladora y le doy sus buenos jalones; me serví y me puse a ver la peli con el gordo. Ya la había visto, así que entre risueño y cansado, me fui jeteando, y él también. Caímos como piedra. De pronto, mi hermana me despierta, me zarandea, me pide que le abra el zahuán para meter su carro. Ah, chingá, si vivo solo, pensé, ¿cómo le hizo mi hermana para entrar hasta la sala?

Estaba yo entre pacheco y jetón y apendejado, y ella con su bebé recién nacida en los brazos y repitiendo Ricardo, Ricardo viene hasta la madre de borracho...Bueno, bueno, yo no entendía puta madre, si Ricardo es su wey, el papá de la niña y el que viene manejando, ¿cómo va a avenir hasta la madre?...

Sin entender nada, pensaba que estaba en un viaje o un sueño de esos muy vívidos, y actualizado, porque pensé que estaba teniendo una visión de mi hermana ya muy actualizada, porq tenía a su nueva bebé en los brazos.

Pues bajo como puedo a la cochera, descalzo, abro el zahuán y me repite algo que oigo entre sueños y nubes, tu carro, mueve tu carro para que quepan los dos, muévelo, tu carro. Chaaaale, todavía estaba bien sacado de onda, y ella con su bebé y yo volteando pa todos lados como turista. Voy por las llaves arriba otra vez y ahí le digo al gordo, gordo, ¿que está pasando, por qué está aquí mi hermana, por qué metió su carro, gordo, qué está pasando? Me imagino que lo preguntaba yo con la cara de un niño que mandas a dormir de la sala a su cama y va entre amodorrado y pendejo de sueño. El gordo estaba igual de apendejado, pero ya de por sí así está él.

El chiste es que ya todos adentro de la casa, sacan a un chamaco larguirucho del carro completamente ahogado en alcohol, a un grado de la inconciencia, sin poder mover nada por sí mismo, estúpidamente borracho. Se llama Ricardo, tocayo del otro. Yo abrí los ojos e hice una cara de ¿qué chingados es esto, quién es este cabrón fumigado y por qué estoy pisando un charco en la noche en el patio y descalzo?

Mi carnala fue a una fiesta a la que jaló al sobrinito Ricardo, éste se metió más cervezas de las que se aguantan a los 15 años, cayó perdido y, como viven mis dos hermanas en la misma casa (o sea la mamá del niño y la que estaba en esos momentos en mi casa), no podía llegar ella así con el sobrino, ¿con qué cara se lo entregaba a la mamá que se lo había prestado para llevarlo a una fiesta nomás?

El chiste es que me pidió un paro para dejarlos quedar ahí a todos en lo que el chamaco se reponía. Y yo, hasta las quinientas entendiendo qué diablos pasaba; traía cuerda de la mostaza y el sueño.

Los mandé a todos a dormir, pues, me paré dos jalones más pa'l susto y a dormir.
Bueno, todavía recuerdo que antes de quedarme dormido, sentía que era una lechuga, y si me movía un poco era un ramo de flores.
ja...

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