13 abril 2009

Voces silenciadas (María del Carmen de Lara, México, 2009)


En la sala éramos 16 personas al inicio de la función en la José Revueltas del Centro Cultural Universitario de la UNAM. Durante la función se salieron cuatro, dos parejas de novios. Es cierto que era martes y eso pudo haber influido, pero aún así, no creo que sea una de las películas más taquilleras de la temporada; y qué mal. El tema central de este documental es la negativa de Televisa Radio y el grupo español PRISA (una de sus glorias es el diario El País) para renovar en el año 2008 el contrato de la periodista Carmen Aristegui en uno de los noticieros matutinos más escuchados en México, Hoy por hoy, que se transmitía por las mañanas en WRadio. La conductora abordaba temas invisibles o cuidadosamente minimizados en otros medios, como las muertas de Juárez; Oaxaca y el fraude electoral en 2006; los pederastas libaneses y su relación con funcionarios como el famoso góber precioso, Mario Marín; la señora violada por soldados en Zongolica y que se supone que murió de gastritis; la ley televisa y muchos temas de interés nacional que presentaba, siempre que era posible, acompañados de las dos caras de la moneda, con los principales involucrados al micrófono. Participaba también gente como Lorenzo Meyer, Alfredo Jalife-Rahme, Sergio Aguayo, Denise Dresser, etc.

Este documental, más bien un video testimonial con la participación de destacados periodistas, académicos y escritores de postura crítica, hace un breve repaso a las luchas por la libertad de expresión en México y los casos de censura perpetrados por las dos grandes cadenas de medios masivos del país (Televisa y tv Azteca), quienes se han valido de astutas estrategias para salir siempre ganando y bien paradas ante la opinión pública (que ellas mismas fabrican si la real no les es favorable), incluso cuando llevan a cabo asaltos a la luz del día, como la toma del canal 40 en 2003 por parte de tv Azteca o cuando hacen sutiles propuestas, como el caso de la ley televisa (oficialmente conocida como Ley Federal de Radio y Televisión), promovida en 2006 y que de hecho favorece a ambas televisoras.

Ahora, en 2009, Carmen Aristegui está de nuevo al aire en MVS radio. La versión no oficial, pero la más aceptada, es que, junto con Gutiérrez Vivó, fue censurada por la entrante administración calderonista. El góber diría que nomás “le dieron un coscorrón a la vieja cabrona”, pues estaba resultando ser una piedrita en el zapato para la actual administración de Felipe C y los altos compromisos empresariales que contrajo para ponerse en la silla.

Algo de lo que más se aprecia de este trabajo es el hecho de documentar puntualmente un suceso muy reciente (a Carmen la sacan de WRadio en enero de 2008) y darlo a conocer a través de las salas de cine. Uno puede o no simpatizar con la periodista, pero lo que no puede perderse de vista es que el gobierno hoy, como antes, acomoda a los medios a su favor, sea por medio de atractivas concesiones o a través de la ley del garrote. Nadie de Televisa o PRISA accedieron a una entrevista para el documental.

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